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jueves, 22 de mayo de 2014

Ramón Bilbao Edición Limitada - 2010

Hoy tengo el gusto de presentaros un excelente vino de la D.O. Rioja: Ramón Bilbao Edición Limitada, vino de crianza de 2010 seleccionado especialmente de 965 barricas de esa añada para embotellar 287.309 botellas de 75 cl (de las cuales yo he probado la numerada 280.609) y 10.420 botellas magnum (1,5 l).

El producto se nnos presenta en una botella bordelesa con el elegante logotipo de la bodega en el hombro. El etiqutado consiste en una sencilla y pequeña etiqueta negra con el nombre de la bodega y la denominación del vino en letras blancas, acompañada de otra etiqueta negra bordeada en blanco con el o. de orden de la botella dentro de la tirada y la D.O. de Rioja. Etiquetas quizá no demasiado atractivas pero que en mi opinión cumplen con el objetivo de indicarnos que se trata de un producto, de alguna forma, especial.

En 1924, Ramón Bilbao Murga crea estas bodegas, aunque ya llevaba vendiendo vino desde 1896. Según nos dicen en la página web de las bodegas, fue un "cosechero avanzado, pionero en el arte de la crianza de vinos". El enólogo de la bodega en la actualidad es el señor Rodolfo Bastida.

La Edición Limitada de 2010 nos presenta un vino 100% varietal Tempranillo, una añada de uva calificada de Excelente por el Consejo Regulador de esta D.O. En esta ocasión, existen diferencias entre la información de las etiquetas y la de la página web, ya que nos indican en esta última que la cantidad de botellas fueron 267.160 de 75 cl y 11.110  botellas del tipo Magnum. También hay una diferencia en la información sobre la crianza, ya que en la contraetiqueta del producto se nos indican 14 meses en barrica y 8 en botella, mientras en la web nos dicen que el envejecimiento en el botellero subterráneo fue de 10 meses. El vino tiene una graduación de 14% de alcohol en volumen.

Pero vayamos a lo importante...

Visualmente, se nos presenta un caldo límpido y brillante, color cereza oscuro, de capa alta y ribete tirando a teja tenue. Lágrima abundante y de caída no demasiado lenta.

A copa parada tiene una intensidad aromática media-alta, que se convierte en una agradable fragancia al instante de agitar la copa. Lo primero que me vino a la nariz fue una dominante de frutos negros (de los más claros y contundentes que he podido notar hasta ahora en cualquiera de los vinos anteriores) acompañados de un fondo de maderas y tostados muy agradables, acertados y elegantes. No he podido ver en las notas de cata que he consultado mención alguna a las notas animales, como de cuero, que pudimos notar mi mujer y yo, y que nos encantaron en combinación con las fragancias anteriormente descritas. Dicha componente de cuero se vuelve más ligeras al rato después de la decantación del vino, pero no deja por ello de estar presente y dotar al vino un aroma o bouquet muy elegante.

Pero lo mejor de este vino, a mi entender, llegó en la boca. Un muy agradable tacto en la lengua, sedoso, con una activación muy agradable de todas las zonas de la lengua, casi sin astringencia, lo cual nos habla de unos taninos maduros y bien asimilados, además de un sabor que contiene todos los aromas citados anteriormente, y un postgusto persistente. En retronasal pude también confirmar los aromas que descubrí en la fase olfativa, con el cuero o aroma animal bastante mitigado pero todavía presente, quizá por esa primera impresión que todavía permanecía en mi cerebro.

Lo bebimos con unos lomos de bacalao al horno. Perfecta combinación...

Creo que este vino,de todas formas, puede combinar con muchísimos alimentos, e incluso sin maridaje puede ser una muy buena elección para tomar una copa de algo mucho más que decente.

Muy recomendable caldo, un producto muy cuidado y bien elaborado y, en mi caso, un claro candidato a estar siempre presente en mi pequeña bodega. En mi opinión vale todos y cada uno de los 9 € que cuesta la botella aproximadamente.

Mi nota es de 8,5/10.

jueves, 15 de mayo de 2014

Gran Bajoz - 2010

Hoy tengo el gusto de presentaros un magnífico vino de la D.O. Toro, ubicada en la ribera del río Duero, más concretamente en las provincias de Zamora y Valladolid. ocupando una extensión de 8.000 Ha de viñedos, de las cuales unas 5.800 están registradas por los 1.200 viticultores adscritos.
Plano Denominación de Origne Toro

Los vinos de esta D.O. deberán estar elaborados principalmente con la variedad de uva Tinta de Toro (Temranillo), autóctona de estas tierras con mayor o menor tiempo de crianza en barricas de roble francés dependiendo del tipo de vino a obtener: joven o de envejecimiento.

El Gran Bajoz es elaborado por Bodegas Pagos del Rey en la localidad de Morales de Toro (Zamora), en viñedos de más de 100 años (según la web, y más de 60 según la etiqueta trasera de la botella) con un rendimiento bajo de unos 2.000 kg/Ha, cosechando y seleccionando los racimos a mano. 



Mapa de la D.O. Toro.
Fuente:Pág web del Consejo Regulador de dicha D.O.

La producción queda entonces reducida a unas 5.000 botellas por añada. En particular, la añada 2010 fue calificada como excelente por el Consejo Regulador.

El Gran Bajoz se nos presenta en una elegante botella bordelesa Imperiale de 75 cl, cuya característica principal es el hecho de que el hombro es más ancho que la base, dándole una forma cónica. La botella está teñida de un color caramelo oscuro, que hace resaltar las letras y figuras doradas grabadas en la misma, o inscritas en la etiqueta color pizarra. A nivel visual, la presentación nos intenta comunicar la sensación de vino serio y de calidad, cosa que, como veremos,coincide con el contenido.

Al decantar el vino, podemos observar un color rubí oscuro, que al concentrarse en la copa torna en un color cereza oscuro de capa media, más bien translúcido, límpido y de agradable aspecto. Su ribete degrada el color inicial hasta llegar al violeta claro. Su 14% de contenido alcohólico se manifiestan en una lágrima  clara, abundante y fina, de caída lenta.


En nariz, el vino cambió bastante desde una primera apreciación a los pocos minutos de abrir la botella, hasta la hora siguiente de decantación. Comenzó dando un ligero aroma alcohólico, pero con una predominante fundamental en aromas frutales frescos, balsámicos, especialmente a pera y eucaliptus. Sorprendente por lo diferente a otros vinos monovarietales de Tempranillo de la D.O. vecina de Ribera de Duero. Mi primera impresión fue como si estuviera oliendo un vino blanco de gran intensidad aromática, con ciertas reminiscencias de frutos rojos muy al fondo. Más tarde, los aromas sufrieron una notable transformación, asimilándose más a lo que dicen las notas de cata que posteriormente repasé, las cuales hablan de aromas de frutas rojas y frutas negras confitadas. Lo que no pude apreciar fueron los matices tostados, de café o cacao que mencionan algunas de esas notas. Los aromas balsámicos que mencioné se mantuvieron al fondo, aunque con bastante menor intensidad que al principio. 

La retronasal, sin embargo, no cambió tanto entre el primer sorbo y la posterior degustación con un tiempo de decantación, en mi caso confirmando las dominantes de frutos rojos y negros, y con ese frescor balsámico que le dotan de un final muy agradable.

El vino resultó muy agradable en boca, con unos taninos muy finos, muy redondo y bien acabado en las sensaciones que provoca en la lengua y el paladar. Buen cuerpo, acorde con la sensación táctil y la permanencia fresca mencionadas, me hace llegar a la conclusión de un vino muy logrado y, a todas luces, recomendable.

Presenta un buen valor para la inversión de  los aproximadamente 11 € que pagué por la botella.

Lo valoro con un 8/10.


domingo, 11 de mayo de 2014

Cuvée Francois 1er de Lionel Truet - 2006

Hoy vamos a hablar de un vino tinto francés de la Apellation d'Origine Controlée (equivalente francés a nuestra Denominación de Origen) Touraine-Amboise: el Cuvée Francois 1er de la bodega Domaine de la Grande Foucaudière, de Lionel Truet.

Esta denominación de origen se encuentra ubicada en la zona de Valle del Loira, cerca de la ciudad de Tours, al sur de París. Esta botella nos la trajo mi suegro, después de una visita a mi cuñado que se encontraba estudiando en la mencionada ciudad hace unos años...

Este viticultor afirma cultivar y cosechar las uvas, en sus 4 Ha de viñedos, siguiendo técnicas tradicionales: tratamientos naturales, cosechado a mano, bajos rendimientos y selección de las uvas, así como elaborar sus vinos con métodos tradicionales de vinificación, asistidos por las nuevas técnicas.

El vino está ensamblado a partir de tres variedades de uva: Côt , Cabernet Franc y Gamay.

Antes de comentar el vino, voy a dar unas breves pinceladas de las uvas que lo componen, por ser el primer vino que analizo con estas variedades.

Côt: también denominada Côt Noir o, más comúnmente en la actualidad, Malbec, es una variedad originaria de la zona suroeste de Francia (Burdeos). Se cultiva hoy en día en Argentina, USA y Chile, por ejemplo, con gran éxito en algunos casos, especialmente en caldos argentinos. Sus vinos se caracterizan por un color muy oscuro, unos taninos robustos y gusto a ciruelas.

Cabernet Franc: Uva emblemática del Valle del Loira, y una de las variedades más conocidas. El vino producido con esta variedad tiene poco cuerpo, color y acidez, pero es muy aromático, por lo que se utiliza en combinación con otras variedades para suavizarlas y aromatizarlas.

Gamay: La uva Gamay, cosechada principalmente en esta zona de Francia, así como en Suiza, produce un vino muy ligero que se puede beber joven o ser utilizado para suavizar los caldos procedentes de otras variedades.

La Cuvée Francois 1er, por lo que he podido ver, es la denominación que se le da al ensamblaje de estas tres variedades. Ni la bodega ni la Asociación de Viticultores de Touraine-Amboise especifican la relación de volumen de las dos primeras variedades, solo mencionando el 5% de composición de uva Gamay. No he podido encontrar una descripción del método de maceración y crianza, salvo que se utilizan barricas de roble, y que este vino está preparado para beberlo joven, o dejarlo envejecer, que es lo que he hecho yo (he de reconocer que no de una forma premeditada), habiendo aguantado el vino estos años en botella perfectamente.

Estas características de los componentes de nuestro vino de hoy explican en gran medida el aspecto, olor y sabor de este estupendo vino. Pero vayamos por partes, como siempre.

El Cuvée Francois 1er de Lionel Truet se nos presenta en una botella renana de 75 cl de color caramelo, con el símbolo de la flor de Lis del Valle del Loira en relieve en la curvatura hacia el cuello, muy elegante, combinada con una poco atractiva etiqueta estructurada a base de rectángulos grises con uno central color hueso que contiene el dibujo de una casa típica de la zona. Las letras del nombre del viticultor se resaltan en color dorado en la parte inferior de la etiqueta, y en lateral izquierdo se muestra un contenido de alcohol del 12% así como el volumen de la botella y la dirección de la bodega en letras blancas.

El año de la cosecha viene marcado con una etiqueta que tapa la inscripción original que venía impresa en la etiqueta: año 2002. Buena forma de aprovechar etiquetas sobrantes de otras añadas.

En cuanto al vino en si, lo primero que podemos apreciar en él es un color cereza oscuro, de capa media, con ribetes color teja que podrían hablar de una estancia bastante larga en la botella. El caldo tiene una apariencia cristalina, de lágrima escasa. Una vez decantado, pudimos apreciar la gran cantidad de posos, aunque en ningún momento estos dieron una apariencia turbia al vino.

De no mucha intensidad aromática, a nivel olfativo resultó bastante agradable y dominada por los aromas primarios, con una gran componente frutal pasificada, seguramente por la influencia de su componente Malbec. Noté ciertos matices minerales que no podría describir apropiadamente, pero que, sin resultar ni mucho menos desagradables, matizaban el aroma frutal del caldo.

En boca, me pareció un vino muy agradable, ligero pero con personalidad, unos taninos muy afinados un una permanencia que, sin ser larguísima, si me pareció suficiente. Pude confirmar el matiz mineral en retronasal junto con el resto de componentes frutales.

En suma, un vino que me sorprendió gratamente, que combinó bastante bien con unos garbanzos con puntas de jamón ibérico deliciosas, y que se puede llevar bien con entremeses (Lionel Truet habla de platos ligeros o más elaborados). Yo diría además que el maridaje con quesos curados y de sabor fuerte podría funcionar muy bien.

Al ser un regalo comprado en Francia hace bastante tiempo, no se qué precio podría tener allí. Lo busqué en internet y por los precios de otras añadas podría decir que ronda los 7,5 €. Diría que no está mal, para los precios de los vinos franceses en general, pero quizá un poco caro si lo comparáramos con un vino español de similar calidad.

Mi nota es de 7/10.

viernes, 2 de mayo de 2014

Mario - 2011

En esta nueva entrada, os presento un elegante vino tinto de la D.O. Ribera de Duero, elaborado por Bodegas Vega Clara, en la localidad de Quintanilla de Onésimo (Valladolid): Mario 2011.

Como siempre, haré referencia a la presentación del vino, que viene en una botella bordelesa de color caramelo de 0,75 l de capacidad, y etiquetado con una elegantísima y simple (ya os habreis dado cuenta de mis preferencias a este respecto) etiqueta blanca con arabescos en negro emulando, supongo, el ramaje de las vides en negro, y combinando caracteres en rojo y negro. Pero en esta ocasión también me gustaría hacer referencia a la página web de esta bodega dirigida por Clara Concejo Mir (www.vegaclara.com), ya que me ha llamado poderosamente la atención lo bien hecha que está tanto desde el punto de vista estético como técnico, aportando de una forma clara y concisa múltiples detalles sobre los viñedos y la elaboración de sus vinos.

De esta forma, nos dice Clara que el Mario 2011 proviene en un 75% de uvas de la variedad Tempranillo y un 25% de Cabernet Sauvignon, cosechadas en la Finca del Pago de Carretuerta, con cepas de 40 años de antigüedad, vendimiadas a mano con un rendimiento de 4.000 kg/Ha. Este dato se encuentra bastante por debajo del rendimiento máximo  admitido por el Consejo Regulador de esta D.O. (7.000 kg/Ha), por lo que podemos suponer que la bodega cuida la calidad de sus caldos desde su origen. La producción estuvo limitada a 9.500 botellas según la web (aunque la etiqueta trasera habla de 10.000 botelleas).

Su elaboración, con el resultado final de un caldo de 14,5 % de alcohol, incluye un proceso de crianza de 14 meses en un 35% en barricas de roble americano de Missouri, 40% de roble francés de Allier y 25% de roble de Europa del Este. También hablan de un proceso de "bâtonnage" manual.

El "bâtonnage" es un proceso que consiste en remover los residuos del vino (heces, lías -proveniente del francés lie) del fondo de las barricas para aumentar el sabor del vino, antes de trasvasarlo a otro recipiente.

El Mario 2011 es de capa muy alta. Tiene un color picota oscuro, con ribete púrpura, de lágrima profusa y caída lenta. Es límpido y cristalino.

De intensidad aromática media a copa quieta, nos entrega aromas claramente frutales al agitarla, en mi opinión predomina el olor a cerezas, aunque en la nota de cata como en la web también nos indican aromas de fruta negra. Es en los olores a especias en lo que no coinciden las notas de cata que he visto, y que yo no noté en exceso. Se habla de trazas de canela, clavo, pimentón, por un lado, y por otros de cacao... Si que estoy de acuerdo con cierto aroma a licor de cerezas (kirsch en alemania), pero puede ser por la propia dominante acerezada que noté. En mi opinión, el vino posee un notable aroma secundario a levadura o brioche, que sigue manteniendo al rato de haberlo decantado. No he visto nota de cata que lo mencione.

Al gusto, el Mario nos entrega un tacto suave pero potente y con cuerpo, así como un sabor elegante, persistente y con un toque de amargor quizá un poco excesivo para mi gusto. También me pareció que le falta algo de redondez a los taninos, dada la sensación de astringencia en la lengua. El tiempo en botella se encargará de darle la pizca de suavidad adicional que, en mi opinión, le vendrá muy bien.

En resumen, el Mario 2011 es un vino muy agradable, que hace honor a su cuidada elaboración. Lo tomamos con unos lomos de bacalao al horno, y la combinación funcionó bien (¿será debido a mi gusto por los vinos de Ribera de Duero?) aunque me pareció que sería una muy buena combinación con carnes rojas de calidad poco hechas.

Mi nota es de 7/10.